Tras las huellas de Madre Cabrini.

Hermana Sonia Margarita Osorio Gaitán, guatemalteca es una Misionera del Sagrado Corazón de Jesús. Congregación religiosa fundada por la Santa Madre Cabrini, Patrona de los Emigrantes. Actualmente presta servicio misionero al fenómeno de la migración. Está integrada en la Red Jesuita para Migrantes en América Central. Nos cuenta algunas de las muchas experiencia de trabajo para los migrantes.

Este mes de enero 2022 he vivido un tiempo muy intenso. He acompañando la caravana de migrantes hondureños en la frontera Aguas Calientes, entre Honduras y Guatemala; el acompañamiento a una familia en el proceso de reconocimiento del cuerpo de su hijo, que iba en el camión que se accidentó en Chiapas el 19 de diciembre 2021 y que llevaba más de 150 migrantes; y la celebración del primer aniversario de los 19 migrantes asesinados en Tamaulipas el 22 de enero 2021. De esos 19 asesinados, 14 eran de Comitancillo San Marcos, Guatemala.  El 20 y 21 de enero en San Marcos tuvimos una Eucaristía y se inauguró in mural en honor a las victimas y sus familias, el mural representa el proceso de duelo y de esperanza.

 “He visto la opresión de mi pueblo en Egipto y he oído los gritos de dolor, provocado por los opresores; conozco sus sufrimientos…” éxodo 3, 7

Con este texto del libro del Éxodo inicia el prólogo del libro “El vuelo del colibrí” que contiene la reseña de cada uno de los migrantes asesinados y calcinados en Camargo Tamaulipas y también narra el proceso de acompañamiento de duelo a sus familias hecho por la Red Migrante. Yo he tenido la gracia de acompañar estas familias durante algunos meses en los procesos grupales, también hemos aprovechado para visitar a cada familia, escucharlos y animarlos.

Mas adelante el mismo texto dice: 

“He bajado para librarle de la mano de los egipcios y para subirle de esta tierra a una tierra buena y espaciosa; a una tierra que mana leche y miel…”

Esta experiencia de celebrar el primer aniversario de estas víctimas de Tamaulipas, tiene una doble realidad y sentimiento, por un lado, el gozo que da “el abajamiento de Dios para liberar a su pueblo” y la certeza que vienen del Evangelio, donde no son los hartos y satisfechos los que gozan del banquete del Reino, sino los forasteros, los de las plazas, los caminos, los descartados, los que, como el Maestro, no tienen donde reposar la cabeza. 

La otra realidad es la indignación de ver como siguen llegando los cuerpos de las victimas del “accidente” del Chiapas en los que iban tantos migrantes, en su mayoría guatemaltecos, donde vemos que la sangre de nuestros hermanos y hermanas siguen clamando por justicia. 

Todos somos hermanos y hermanas y debemos comer en la misma mesa porque la tierra es de todos y produce para todos.

La esperanza centuplica la fuerza, dice nuestra fundadora, Santa Madre Cabrini. Creo que esta es una realidad del equipo de la RJM extendido a nuestras familias y comunidades, donde laicos y religiosos, hombres y mujeres, vivimos con alegría el encuentro con nuestros hermanos, haitianos, venezolanos, nicaragüenses, hondureños, guatemaltecos, que con su coraje nos interpelan a salir de la comodidad y buscar siempre algo mejor.

  

Red Jesuita con Migrantes (RJM)

De Hna, Sonnia Margarita Osorio, MSC

Enero, 2022